, Vivian Wilson, hija trans de Elon Musk, debuta en la Semana de la Moda de Nueva York
ATA - Sylvia Rivera • 16 de septiembre de 2025
En la Semana de la Moda de Nueva York, Vivian Wilson desfiló para las firmas Alexis Bittar y Prabal Gurung
Vivian Wilson, la hija de Elon Musk, ha debutado en la Semana de la Moda de Nueva York. La joven de 21 años no solo desfiló, sino que también aprovechó la pasarela para criticar las políticas agresivas de la administración Trump, especialmente aquellas que limitan los derechos de la comunidad trans.
Debut
Tras aparecer en varias portadas, Vivian debutó en la Semana de la Moda de Nueva York. Para el desfile de Alexis Bittar, lució un vestido rojo acompañado de una cinta brillante con la inscripción “Miss South Carolina”.
El desfile
El diseñador recuperó el estilo de los concursos de belleza de los años noventa, incorporando un giro surrealista y una crítica a los estereotipos de género. Inspirado en películas como Terciopelo azul, Carrie y Las vírgenes suicidas, el desfile buscaba criticar la misoginia, los depredadores descontrolados y la cosificación, al mismo tiempo que defendía los derechos de las personas transgéneros, según explicó el diseñador en Instagram.
Además de Carolina del Norte, el desfile incluyó representaciones de Virginia Occidental, Florida, Utah, Tennessee, Alabama y Luisiana. «Elegí deliberadamente a cada candidata para representar a un estado norteamericano en el que los derechos de las personas trans están amenazados», dijo el diseñador.
Vivian Wilson
La estudiante neoyorquina, ya había expresado su interés por incursionar en el mundo de la moda. “Me ponía muy nerviosa que me malinterpretaran o que pensaran que no valía para esto”, declaró a The Cut tras su sesión de fotos para Teen Vogue. En junio, cumplió otro de sus sueños al participar en el espectáculo drag benéfico de Pattie Gonia bajo el nombre artístico de Vivllainous.
Desde 2022, cuando solicitó legalmente su cambio de nombre e identidad de género tras iniciar su transición a los 16 años con el apoyo de su madre, Vivian se ha distanciado de su padre. Actualmente, vive en Los Ángeles, en un piso compartido y asegura no recibir ayuda económica del empresario.
Con su debut en la Semana de la Moda de Nueva York, Vivian Wilson reafirma su compromiso con la moda y los derechos de la comunidad trans, demostrando que su camino va más allá de su apellido.
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Noticias

Agustín Dante López dice que lo que veía en el espejo no lo representaba, habla del bullying que sufrió en la primaria, narra con crudeza los embates de su trastorno de alimentación, cuenta que aunque la balanza declaraba 38 kilos él se sentía gordo, repasa las mentiras a su familia, los engaños en la cena, su fiesta de 15, las autolesiones o esa manera brutal de exteriorizar un dolor interno. Agustín habla de cómo una serie le despertó una epifanía, rescata la advertencia de su hermana y la voluntad de una médica, de su miedo a morir y de sus impulsos suicidas, hasta llegar a su transición. “Transicionar fue lo mejor que me pudo pasar en la vida”, define. Durante su relato utiliza el pronombre masculino cuando se desplaza entre los recuerdos de su niñez y adolescencia. No se trata de un error, sino de un comportamiento voluntario, el corolario de un proceso de entendimiento. “Al principio traté a ese niño en femenino como para que se entendiera a qué me refería, pero ya no”, dice. “Es algo que por lo general incomoda. La gente te dice ‘bueno, pero eras nena en ese momento’. Sí, pero ahora soy un varón y hay que entender que todo ese tiempo también lo fui, solamente que no le podía poner un nombre”. Él siempre se refiere a él como Agustín, incluso en la semblanza de esos años. Su vida, antes y después de identificar lo que le pasaba, con enfermedades e internaciones, que siempre, a pesar de los contratiempos y las confrontaciones, estuvo secundado por un entorno familiar permeable y amoroso. “Hay muchos compañeros y compañeras trans que los echan de la casa, que la familia los golpea. Hay muchas personas trans que caen en autolesiones, que se suicidan, que caen en consumos problemáticos, que el único recurso que tienen es la prostitución. Y es terrible. Qué privilegio la familia y el entorno que tengo”, agradece. Pero para llegar a esa comprensión, primero la infancia, el bullying y el trastorno de la conducta alimentaria. “Mi infancia fue difícil. A los tres años y medio empecé, y agradezco tanto a mi mamá que yo hoy en día le pregunto cómo me anotaste en teatro musical. Me acuerdo de que daba shows en el living de mi casa y les daba folletitos a todos para que vengan a verme y mi mamá me dijo ‘yo te vi con capacidades y vi que te gustaba, entonces te llevé’. Tenían un convenio con mi colegio, entonces empecé ahí a tomar las clases de comedia musical y me encantó”. —La infancia estuvo atravesada por el arte, la actuación, la música. —Todo el tiempo. —¿Eso fue un espacio que salvó en algún punto? —Sí. Porque yo desde muy chiquito no sentía que me encontrara cuando me miraba al espejo. Desde muy chiquito recibí mucho bullying en la escuela por mi peso. Yo de chiquito, no sé si lo podría diagnosticar por así decirlo como trastorno por atracón, pero comía mucho. Manejaba y regulaba mis emociones desde ese nivel. Y me acuerdo que recibí mucho, mucho bullying en la primaria y en el viaje de séptimo grado, que íbamos a Carlos Paz, me tenía que poner malla. Realmente no me encontraba en el espejo y odiaba cómo me veía. Y me acuerdo de que en ese momento empecé a comer menos, a restringir. Mi mamá se daba cuenta y me decía “pero esto es muy poco”. Por ahí comía solo, no me gustaba comer con nadie. —¿Ahí empezarían los trastornos de alimentación? —Se desató muy fuerte en el viaje de séptimo grado cuando yo sabía que me tenía que poner malla y empecé a comer menos, a comer menos, y veía que gente externa, no mi familia, me decía “qué flaca que estás, qué linda que estás”. Entonces lo tomaba como algo bueno, voy por buen camino. Está bien pasar hambre, restringirme, porque la gente me ve mejor. Me sentía más lindo. —¿Alguien en tu casa se daba cuenta de los ataques que estabas recibiendo? —No. Yo no contaba mucho tampoco. Me lo guardaba. Como es una enfermedad tan silenciosa y tan solitaria yo lo llevaba… Si mis papás se daban cuenta realmente lo que estaba pasando iba a tener que recuperarme y era algo que yo no quería porque sabía que eso conllevaba subir de peso y yo lo veía como lo peor que me podía pasar en la vida. Subir de peso era que volviera el bullying, volviera el odio al verme al espejo. —¿Se fue incrementando eso? —Mucho. —¿Qué pasó? —Lo que me pasaba en invierno es que también en ese momento de mi vida, en séptimo grado descubrí lo que eran las autolesiones. Dentro de todos los tipos de autolesiones yo en ese momento empecé a cortarme. Me pasaba que yo en invierno como podía usar ropa grande o ropa que no se notara mi cuerpo recurría a eso, a las autolesiones, para descargar todo el dolor. Es como un dolor que no tiene explicación. No lo podía explicar. Es como un dolor en el alma. Es lo peor que le puede pasar a un ser humano: sentir tanta angustia que te lleva a ese momento de desesperación, ese impulso que decís necesito sacar el dolor que tengo adentro para expresarlo en un dolor corporal. Necesitas dejar de sentir ese dolor interno que no te deja hacer nada: no te deja bañarte, no te deja lavarte los dientes, no te deja levantarte de la cama. El TCA (Trastornos de la conducta alimentaria) es una enfermedad muy solitaria también: no te querés juntar con gente porque siempre que te juntás significa compartir algún momento, comer algo, tomar unos mates, compartir unas facturas, salir a comer.

Un tribunal de Lima en Perù condenó este lunes a 17 años de prisión a cada uno de los tres policías que torturaron y violaron a una mujer trans en una comisaría en 2008, un caso por el que fue sancionado internacionalmente el Estado peruano. La sentencia fue leída durante la audiencia final del juicio oral iniciado en enero, y que fue transmitida por el canal del Poder Judicial. En abril de 2020, la Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó a Perú por la brutal agresión que sufrió Azul Rojas cuando tenía 34 años, tras ser detenida en una comisaría del norte de Perú. Dos años después, en un hecho histórico para la comunidad LGBT y Trans, el gobierno peruano pidió perdón a la víctima. Por pedido de la justicia interamericana, Perú siguió con las investigaciones contra los acusados, que respondían al juicio en libertad. Este lunes, el tercer juzgado penal dictó su sentencia por los delitos de tortura agravada y abuso sexual. «Se impone una condena de 17 años de prisión para los efectivos policiales Dino Ponce, Luis Quispe y Juan León», según el fallo. La justicia ordenó la reclusión inmediata de los tres condenados. Según pudo probar la fiscalía, los efectivos policiales detuvieron y agredieron a Azul Rojas en una comisaría de la localidad de Casa Grande, en la costa norte de Perú. Allí fue sometida a «maltratos físicos, psicológicos, violación sexual», indicó el Ministerio Público en un comunicado. https://elnuevodiario.com.do

Kenia Bonilla dejó en alto el nombre de Ecuador en el certamen de belleza Miss International Trans 2025, donde se coronó como la máxima ganadora. La oriunda de Santo Domingo de los Tsáchilas destacó en el evento desarrollado en Lima, Perú, el reciente sábado 6 de diciembre de 2025. Nueve candidatas, de diversos países, pugnaron por la corona. Kenia Bonilla irá a Países Bajos Durante la gala final del certamen, Kenia Bonilla ganó la corona absoluta. Mientras que la mexicana Mitchell Lagunes fue la primera finalista y la peruana Cirja Emiliana fue la segunda finalista. Tras la coronación, la ecuatoriana recibió como premios un iPhone 17, más de 3 mil dólares en productos de la marca Dior y pasajes de ida y vuelta para Países Bajos, donde se celebrará la edición 2026 del Miss International 2026. Cabe mencionar que Kenia recibió la corona de manos de su antecesora, la peruana Keyla Fernández. Por otra parte, la también ecuatoriana Ohanna Jiménez fue elegida como el Mejor Rostro del certamen. Deja huella en los certámenes Kenia Bonilla, nacida en Santo Domingo de los Tsáchilas, es una modelo profesional de 29 años y la primera mujer trans en competir en el Miss Universo Ecuador. Su participación en este 2025 marcó un hito de inclusión en el certamen, promoviendo la diversidad de género en Ecuador. En febrero de 2025, se postuló al casting de Miss Universo Ecuador, destacando su mensaje de autenticidad: “Soy la primera, pero no la última”. “Este no es solo un logro personal, es un paso hacia una sociedad más inclusiva, justa y representativa para todos”, dijo tras ser anunciada como candidata oficial. Entre las 20 candidatas oficiales, Bonilla brilló en la competencia preliminar en Cuenca, desfilando en trajes de baño y gala. Avanzó a las 10 semifinalistas en la final del 26 de julio en Guayaquil, aunque Nadia Mejía se coronó ganadora. Su visibilidad inspira a la comunidad LGBTI y refuerza las nuevas reglas inclusivas del concurso, sin límites de edad, estado civil o identidad de género. Cabe mencionar que en agosto de 2024 representó al país en el Miss International Queen en Tailandia, un concurso internacional para mujeres trans con participantes de 23 naciones. Sobre el Miss International Trans El certamen Miss International Trans es una “plataforma de inclusión social, visibilidad y respeto”, que trabaja con embajadoras de belleza trans a nivel mundial. Según informó la organización, esta tiene sede en Bélgica y organiza eventos de belleza LGBT en distintas naciones. La victoria de la ecuatoriana Kenia Bonilla marca un nuevo hito en la lucha de las mujeres trans del país por la igualdad y la tolerancia.

Un informe que celebra a los hombres cis que se someten a reducciones de senos “para sentirse bien” en sus cuerpos ha enojado a muchos que dicen que eso también es lo que quieren las personas trans. Un informe reciente que detalla la inmensa popularidad de la cirugía de reducción mamaria entre los hombres cis ha hecho estallar a los defensores de las personas trans por el hecho de que la atención de afirmación de género siempre ha sido celebrada para las personas cis pero demonizada para las personas trans. El Correo de Nueva York publicó un artículo el 3 de diciembre que explicaba que la cirugía de reducción mamaria es la cirugía plástica más popular entre los hombres cis del país. En algún momento de sus vidas, casi la mitad de los hombres experimentan una afección llamada ginecomastia, que es un aumento en el crecimiento de las glándulas mamarias debido a menudo a un desequilibrio hormonal. No es perjudicial para la salud física de un hombre y, por lo tanto, sólo debe “arreglarse” si hace que alguien se sienta cohibido.

El viernes, 28 de noviembre, se convirtió en un día histórico en materia de derechos, para los integrantes de la comunidad LGBT+ en Colombia. La registraduría implementó dos nuevos géneros en la cédula de ciudadanía, física y digital: la (T) para personas trans y las siglas (NB) para personas no binarias. Es la culminación de años de esfuerzo de la entidad por demostrar su “compromiso institucional de garantizar el derecho a la identificación de las personas trans y no binarias en el país”. “Desde la Casa LGBTI Sebastián Romero, en Bogotá, anunciamos el fortalecimiento de nuestra solución integral de registro civil e identificación, con la inclusión de las categorías ‘no binario’ (NB) y ‘trans’ (T) en el campo ‘sexo’ de los registros civiles y documentos de identidad. Un paso clave para reconocer y garantizar el derecho a la identificación de las personas con identidad de género diversa”, indicó la Registraduría en sus redes sociales. Ya se expidieron las primeras cédulas de personas trans y no binarias del país: Dos de las primeras personas en obtener sus cédulas con los identificadores de género T y NB fueron Tonny y Mike, precisamente, en el evento realizado en la Casa LGBTI Sebastián Romero. De acuerdo con la entidad, “el Registrador Nacional indicó que ya están listos los ajustes para que personas no binarias puedan realizar sus trámites en todas las oficinas, incluyendo la cédula digital, asegurando así acceso equitativo y eficiente a los servicios de identificación”. Un cambio que celebran Tony, Mike y el resto de personas de Colombia con identidades diversas. Y es que, de acuerdo con este último, “ha sido un camino de casi cinco años y hoy celebramos que ya somos reconocidos por el Estado". El cambio podrá realizarse en cédulas en físico y en su versión digital, en todos los puntos de la Registraduría, desde este viernes. https://www.noticiasrcn.com

La Corte Constitucional reiteró que ninguna persona trans puede ser excluida de su núcleo familiar por ejercer su derecho a la identidad de género. Esto sucedió tras fallar a favor de Fabiola, una mujer trans que acudió a la justicia tras ser rechazada y violentada por sus propios familiares. Y es que el alto tribunal reafirmó que el enfoque de género es una obligación para todas las autoridades que intervienen en controversias familiares y que, en el caso de la población trans, deben garantizarse condiciones que eviten cualquier forma de discriminación o desigualdad. Caso de Fabiola El pronunciamiento se dio tras estudiar la situación de Fabiola, quien recurrió a la tutela después de que la comisaría de familia encargada de su caso no aplicara adecuadamente este enfoque frente a episodios de violencia que ella denunció. La mujer acudió al mecanismo de amparo buscando protección frente a agresiones y malos tratos que recibía de su madre y de sus hermanos. Según ella, la entidad que debía brindar acompañamiento no aplicó el enfoque de género pese a tratarse de una persona trans, categoría que la Constitución reconoce como sujeta de especial protección. Con la tutela, el caso llegó a la Sala Cuarta de Revisión de la Corte Constitucional, que finalmente decidió amparar los derechos de la mujer, entre ellos la dignidad humana, la igualdad, el libre desarrollo de la personalidad, la identidad de género, el debido proceso y la vivienda digna. Pues en su decisión, la Corte recordó que todas las autoridades, y en especial las adscritas al sistema de justicia familiar, deben aplicar el enfoque de género de manera estricta. En el caso de personas trans, este deber se intensifica y exige evaluar cada situación, descartando cualquier trato discriminatorio o la reproducción de desigualdades históricas. El alto tribunal incluso formuló una nueva subregla, cuando una autoridad de familia no utiliza de forma correcta los enfoques diferenciales en casos que involucren personas LGBTIQ+, mujeres, adultos mayores o menores de edad, termina vulnerando los derechos fundamentales de quienes resultan afectados por esa omisión.

La drag queen favorita de la Madre Naturaleza, Pattie Gonia, lució deslumbrante en la alfombra roja el fin de semana, con un vestido hecho con la bandera trans que se vio colgada en el parque Yosemite a principios de este año. La activista y artista ambiental fue la comidilla de la Gala Out100 el domingo (23 de noviembre) después de aparecer vestida con una bandera trans de 66 pies de largo, que habían convertido en un vestido sin tirantes. Asistió a la ceremonia anual de premios junto con el ex guardaparque no binario de Yosemite Shannon “SJ” Joslin, quien supuestamente fue despedido de su trabajo en agosto después de que se izara la bandera en El Capitán, una formación rocosa en el parque nacional de California. “Estimada administración Trump: puede despedirnos, puede defender nuestros parques nacionales, puede decirnos que no somos válidos y que no deberíamos existir, y seguiremos convirtiendo su miedo y odio en amor y comunidad y ganaremos porque siempre lo hacemos”, dijo Joslin a los periodistas. Un grupo de escaladores, incluida Pattie Gonia, ayudaron a colocar la bandera en la pared de la roca como una forma de resaltar que las personas trans pertenecen “a la naturaleza, a la comunidad y a todas partes”. Un mes después, Joslin afirmó que su contrato había sido rescindido por supuestamente “no demostrar una conducta aceptable” a pesar de llevar a cabo la protesta “en mi tiempo libre, fuera de servicio, como ciudadano privado”. El ex guardabosques continuó diciendo: “Colgué una bandera trans en El Capitán. Ondeó durante un total de dos horas por la mañana y luego la quité”. Otras banderas fueron plantadas en el mismo lugar, señalaron. Cuando se le preguntó sobre su decisión de usar la bandera como vestido, Pattie dijo a la revista Out: “¿Qué mejor declaración de moda se puede hacer que decir que las personas trans son amadas? Y hacerlo mientras se ‘recicla’ algo que la administración Trump intenta demonizar”. Una semana antes, Pattie recurrió a Instagram para criticar al secretario de Guerra, Pete Hegseth, por su retórica anti-LGBTQ+, mientras realizaba más dominadas de las que se le había visto haciendo en un clip viral que resurgió recientemente. https://www.sentidog.com

La creciente visibilidad de las infancias y las adolescencias trans ha estado acompañada por un aumento de la desinformación en los medios de comunicación y las redes sociales. Se han difundido narrativas falsas —como la idea de que a las infancias se les realizan cirugías obligatorias o que hablarles de diversidad genera confusión en la conformación de su identidad— para alimentar el miedo, justificar la censura educativa y obstaculizar la implementación de políticas de acompañamiento. Estos mitos surgen desde el desconocimiento y los prejuicios históricos sobre el género. Grupos conservadores, líderes de opinión y algunas figuras públicas suelen presentar a la identidad trans como una amenaza a las normas sociales tradicionales, mientras que en redes sociales se reproduce desinformación que simplifica o tergiversa la realidad. Estas narrativas falsas obstaculizan el acompañamiento respetuoso a la identidad de cada persona y el reconocimiento de sus derechos humanos. Las consecuencias de estas desinformaciones son reales: afectan la percepción social, fomentan la discriminación y ponen en riesgo la salud mental y física de las infancias trans y sus familias. ¿Qué significa ser una infancia trans? “¿Es niña o niño? No sé, aún no sabe hablar” es la frase de Kate Bornstein, autora y dramaturga estadounidense que representa la libre elección de identidad de género. Al hablar de identidades trans se alude a aquellas personas cuya manera de estar en el mundo, expresarse y presentarse hacen que no se autoperciban ni sean percibidas por otras personas dentro de lo que se espera típicamente del sexo que se le asignó desde el nacimiento. La Consulta Infantil y Juvenil realizada por el Instituto Nacional Electoral en 2024 encuestó a 10 millones 703,505 niñas, niños y adolescentes del país, de los cuales 1.4 % no se identificó como mujer u hombre, es decir, 148,788 personas de entre seis y 17 años no se reconocían con el género con que nacieron. Alrededor de los cuatro años es cuando las infancias comienzan a tener un sentido estable sobre su identidad de género. Durante esta etapa aprenden conductas de roles de género, es decir, “cosas que hacen los varones” o “cosas que hacen las mujeres”, por ello las preferencias entre géneros cruzados o distintos son parte normal de la exploración y el desarrollo infantil, independientemente de su futura identidad de género. Las infancias suelen expresar su identidad de género a través de detalles como su vestimenta, peinado, nombres y conducta social, por lo que padres y madres deben hablar y relacionarse abiertamente con sus hijas, hijos e hijes para asegurarse de que puedan elegir libremente la expresión que se ajuste a su sentir. Un acompañamiento respetuoso involucra acciones como el respeto a los pronombres con los que las infancias elijan ser nombradas, es esencial reconocer de manera administrativa y no judicial la identidad de género de las infancias y adolescencias para garantizar el respeto a sus derechos y no vulnerar sus libertades. 10 desinformaciones sobre las infancias trans El Sabueso revisó datos y experiencias que muestran cómo se construyen —y se pueden desmontar— los prejuicios en torno a las identidades trans en la niñez. “Las infancias no pueden saber si son trans” Falso. Las infancias empiezan a distinguir los géneros masculino y femenino alrededor de los dos años. Y desde esa edad pueden nombrar el género con el que se identifican y se quieren expresar. “Esperar que una infancia se presente como una persona trans es muy complejo; comúnmente suelen demostrarlo con expresiones como ‘yo quisiera ser mujer’ y ‘cuando crezca yo seré hombre’”, ejemplifica Jennifer Blanco. “Las infancias trans deberían esperar a ser adultas para decidir que lo son” Falso. “No es una cuestión de adultez. La madurez ética no llega cuando se cumple la mayoría de edad. Las personas adultas también están en un ciclo constante de cambios”, señala Daniela Muñoz. “La mayoría de los niños trans se arrepienten cuando crecen” Falso. De hecho, un estudio realizado por Jama Surgery asegura que menos de 1 % de las personas trans que se someten a una cirugía de reasignación de sexo se arrepiente. Esta proporción, comparada con el hecho de que 14.4 % de la población en general se arrepiente de cirugías similares, es mínima. “Ser trans es una moda o una influencia externa” Falso. En realidad, la identidad trans existe desde épocas como la colonización, cuando ya se reconocían otros géneros más allá de femenino y masculino como la no binariedad, e incluso se creía que el género era un espectro. Jennifer Blanco explica: “No es una moda o una influencia, sino una identidad”. “Apoyar a las infancias trans las confunde” Falso. Al contrario, contar con una red de apoyo es sumamente importante en estos procesos. “Sentir amor, cuidado y respaldo es crucial para el bienestar mental y la salud de las identidades trans a largo plazo. A menudo, la angustia y confusión que presentan las infancias es por el estigma social y la falta de apoyo”, señala Jennifer Blanco. "A las infancias trans les hacen cirugías o tratamientos médicos desde pequeñas” Falso. Las cirugías en infancias están prohibidas con excepciones puntuales como los procedimientos de carácter reconstructivo por malformaciones congénitas, accidentes o enfermedades, cuando sean necesarios para preservar la salud física o mental y cuando se realicen para prevenir daños graves en el desarrollo integral de la persona. “Hablar de identidad de género confunde o adoctrina a las infancias” Falso. Ni confunde ni adoctrina. Al contrario, que las infancias puedan charlar abiertamente sobre sus sentires es uno de sus derechos básicos. “El pensamiento libre no adoctrina, sino que se logra con conocimiento y conciencia. En este caso, la sexualidad es una ciencia y las ciencias también fomentan el pensamiento individual, crítico y libre desde las infancias”, asegura Daniela Muñoz. “Ser trans es una enfermedad o un trastorno” Falso. Desde 2018, la Organización Mundial de la Salud (OMS) excluyó a la transexualidad de su lista de trastornos mentales. “Las identidades trans no son una patología, está científicamente comprobado. En realidad, la transexualidad le enseña a la población que es libre de decidir y vivir cómo más cómodo, cómoda o cómode se sienta”, comenta Daniela Muñoz. “Los padres y madres que apoyan a las infancias trans son irresponsables” Falso. “¿Por qué apoyar a tus hijas, hijos e hijes sería malo?”, cuestiona Muñoz. Una parte importante de criar respetuosamente a las infancias es escucharlas, cuidarlas y protegerlas. “Todo lo contrario, cuando una persona adulta apoya a las infancias en este tipo de situaciones está apostando por la libertad identitaria y una postura no adultocéntrica”. “Las infancias trans no existen en otras culturas” Falso. “Negar que existen las infancias trans es negar que existe la infancia”, dice la periodista Diana Massis en un artículo de la BBC. No existen estadísticas globales precisas sobre la cantidad de infancias trans en el mundo, ya que los estudios se realizan de forma local o tienen un sesgo por las niñeces que aún no se identifican como trans. Sin embargo, países como Reino Unido, Tailandia y Países Bajos tienen una mayor población LGBTIQ+, según un estudio de Statista. El estudio fue realizado en 2024 en 26 países y concluye que, de media, a nivel global 9 % de la población se declara parte de estas identidades. “Las estadísticas jamás van a ser un número determinante en estos casos porque los espectros son muy amplios y diversas personas de la comunidad no se adentran en uno solo. Además, continúan vulnerando a las infancias porque no las cuentan”, visibiliza Daniela Muñoz. El impacto de la desinformación en la vida cotidiana de las infancias trans “Los discursos de odio contra las identidades trans han aumentado durante los últimos años y esto impacta directamente a las infancias y sus familias”, asegura Jennifer Blanco. “Cuando las y los familiares creen este tipo de desinformaciones se alejan y excluyen a las infancias de los espacios en los que pueden compartir sus inquietudes o vivencias”. De acuerdo con las especialistas, ideas como que las infancias “están confundidas” o que “ser trans es una moda” invalidan sus identidades y generan estrés, ansiedad y aislamiento desde una edad temprana. Además, estas creencias influyen en decisiones dentro de escuelas y servicios de salud, lo que puede traducirse en obstáculos para usar su nombre elegido, vestir acorde con su identidad de género o recibir acompañamiento especializado. “La desinformación es el fenómeno más fuerte al que nos enfrentamos en esta era de la inmediatez. Combatir estos discursos desinformantes y de odio con educación, empatía, esfuerzo colectivo e, incluso, apoyo del Estado para que la información correcta sea difundida debería ser una prioridad para la sociedad”, concluye Daniela Muñoz. https://es-us.noticias.yahoo.com

Los bloqueadores de la pubertad se encuentran entre las formas de atención de afirmación de género más incomprendidas y más dirigidas, y eso no es una coincidencia. A menudo denominados supresores hormonales, son una forma de medicamento diseñado para posponer el efecto físico y emocional de la pubertad que experimentan los jóvenes menores de 18 años. A pesar de su uso común entre jóvenes trans y aquellos que experimentan pubertad precoz, que se remonta a unos 35 años, el aumento de la desinformación y la difamación transfóbica ha generado vagas “preocupaciones” sobre su seguridad, lo que ha resultado en prohibiciones en varios países, incluidos Nueva Zelanda y el Reino Unido. Hay poca evidencia que sugiera que los bloqueadores de la pubertad representen una amenaza para los jóvenes. Las investigaciones que existen casi siempre han demostrado que son seguros, eficaces y, en muchos casos, salvan vidas. Sin embargo, quienes se oponen a los tratamientos contra las personas trans afirman que no existe una investigación lo suficientemente sólida sobre si los medicamentos presentan posibles efectos secundarios físicos o emocionales, e insisten en que no se debe permitir que los jóvenes se sometan a tratamientos potencialmente dañinos o permanentes, a pesar de la falta de evidencia de que los supresores hormonales sean cualquiera de esos. La mayoría de los argumentos contra los bloqueadores de la pubertad se basan en mentiras perpetuadas por grupos anti-trans o, a menudo, ignoran las normas sanitarias fundamentales en el Reino Unido. Estas son algunas de las mentiras más grandes que probablemente hayas escuchado sobre los bloqueadores de la pubertad y por qué son una tontería. “No sabemos lo suficiente sobre los bloqueadores de la pubertad como para prescribirlos a los niños” Mientras lee esto, los médicos y profesionales del NHS están distribuyendo supresores de la pubertad de manera bastante legal y sin controversias a los niños que enfrentan la pubertad precoz, una enfermedad que hace que la pubertad comience demasiado pronto. Es irrelevante si usted cree o no que la pubertad precoz es una razón más justificable para que se le permita tomar bloqueadores de la pubertad. Los profesionales médicos han considerado que los medicamentos son lo suficientemente seguros como para recetarlos a niños de hasta ocho años, sin que su identidad de género haga ninguna diferencia. Hay muchas cosas que no sabemos sobre los medicamentos. Una investigación para The Journal of the American Medical Association ha demostrado que, en muchos casos, los médicos recetan medicamentos sin saber si realmente ayudarán al paciente. Lo que sí sabemos es que los bloqueadores de la pubertad casi siempre mejoran la vida de los jóvenes trans. “Los niños no deberían tomar decisiones importantes sobre su salud” Este argumento choca con las directrices de competencia de Gillick y Fraser, que determinan si un niño menor de 16 años tiene la madurez y la inteligencia para dar su consentimiento al tratamiento médico. La organización benéfica británica Sociedad Nacional para la Prevención de la Crueldad contra los Niños dice que la prueba, introducida en los años 80, se utiliza a menudo en la atención médica anticonceptiva como una forma de equilibrar el derecho humano de un niño a tomar decisiones sobre su propio cuerpo con la responsabilidad de mantenerlo seguro. Los jóvenes no son incompetentes simplemente porque son jóvenes. Un niño o una niña de 10 años pueden ser condenados por un delito penal, un niño de 14 años puede conseguir un trabajo a tiempo parcial y cualquier persona de cualquier edad puede cuidar a otro niño, prestar testimonio en un juicio penal, aunque no bajo juramento, e incluso puede ser demandado (aunque no responsable de una deuda hasta los 18 años). Toda persona tiene el derecho y la capacidad de tomar sus propias decisiones informadas, sin importar su edad. “Son una forma de castración química” No. Los bloqueadores de la pubertad no causan esterilidad, y nunca se ha sabido que lo hagan. Los efectos secundarios raros pueden incluir problemas de fertilidad, al igual que los medicamentos antipsicóticos y la quimioterapia que se administran a personas menores de 18 años. Incluso si los bloqueadores de la pubertad causaran esterilidad, esto por sí solo no es una razón suficiente para prohibirlos. Los niños que se ajustan a las directrices de competencia de Gillick tienen derecho a elegir su propia salud sobre la capacidad de concebir en el futuro, del mismo modo que se tiene derecho a beber alcohol a pesar de que puede afectar a la fertilidad. Nótese el uso de “castración” aquí: una palabra cargada, fuertemente asociada con formas de tortura por parte de regímenes o grupos opresivos. Esto no es una coincidencia: los grupos de derecha rutinariamente intentan asociar la atención trans con una forma de tortura sometida a niños pequeños inocentes. “Los médicos reparten bloqueadores de la pubertad como si fueran caramelos” Nuevamente, esto no es cierto. Los bloqueadores de la pubertad no sólo son actualmente inaccesibles para los jóvenes trans en el Reino Unido y no forman parte de un ensayo limitado del NHS, sino que las recetas siempre han sido increíblemente difíciles de obtener. Antes de la prohibición, la única forma de acceder a los bloqueadores de la pubertad en el NHS era a través de una remisión al Servicio de Desarrollo de Identidad de Género de Tavistock, en el norte de Londres. En su apogeo, los tiempos de espera para una primera cita –que casi nunca resultaba en una prescripción– superaban los dos años. Cuando los jóvenes trans accedían a las instalaciones, normalmente tenían que pasar por varios obstáculos legales y médicos para obtener una receta, todo mientras se producían los efectos de la pubertad natural. En marzo de 2024, el mismo mes en que el Servicio Nacional de Salud de Inglaterra prohibió los bloqueadores de la pubertad, se recetó el tratamiento a menos de 100 personas. ‘No hay pruebas de que ayuden a jóvenes trans’ Sí, hay montañas de eso. Estudios realizados en EE. UU., Canadá, Australia y otros países han llegado a la misma conclusión: los bloqueadores de la pubertad son seguros, eficaces y, sobre todo, posiblemente salven vidas. Un estudio, encargado por el gobierno de Nueva Gales del Sur en Australia, analizó 82 artículos publicados entre 2000 y 2019 y concluyó que los beneficios de los bloqueadores de la pubertad superaban con creces cualquier inconveniente. Otro, de octubre de 2024, mostró que el 97 por ciento de los menores de 18 años de EE. UU. y Canadá que accedían a atención estaban “altamente satisfechos” con los resultados. Otro publicado el mismo año reveló que menos del uno por ciento de los jóvenes trans lamentaban haber comenzado a tomar bloqueadores de la pubertad. Las tasas de arrepentimiento por la atención sanitaria trans son anormalmente bajas. Un artículo del año pasado mostró que el arrepentimiento relacionado con la transición era menor que el de los pacientes que habían optado por la cirugía de rodilla, el aumento de senos e incluso el de tener hijos. Dado que la atención que afirma el género tiene como objetivo mejorar el bienestar de un individuo, la única forma de justificar el pensamiento de que no hay pruebas de que los bloqueadores de la pubertad sean beneficiosos es ignorando a los jóvenes trans. “Es mejor esperar a que sean adultos” Los bloqueadores de la pubertad son medicamentos reversibles que, cuando se recetan, no sólo mejoran significativamente la calidad de vida de una persona trans, sino que también pueden reducir la depresión, la ansiedad y las tendencias suicidas. Casi la mitad de todos los jóvenes trans han intentado suicidarse en el Reino Unido. No es mejor hacer que los jóvenes trans esperen un tratamiento que podría cambiarles la vida. La pubertad natural no es reversible. Una vez que se han producido sus cambios, nadie puede hacer nada. Cuando un padre, tutor, profesional de la salud o político obliga a un niño trans a esperar hasta la edad adulta antes de acceder a atención sin su opinión, está optando por negarle el derecho a detener cambios en su propio cuerpo que nunca podrá revertir. Por eso muchos de ellos se quitan la vida. La idea de que la pubertad es siempre más deseable que los supresores de la pubertad porque es “natural” es errónea y está arraigada en un prejuicio anti-trans. El cáncer es “natural”, los terremotos son “naturales”, las pandemias son “naturales”, pero como sociedad hemos hecho todos los esfuerzos posibles para tratar y prevenir estas cosas porque empeoran la vida de las personas. https://www.sentidog.com

El “Día Local de la Memoria Trans”, que se conmemoró este 24 de noviembre, fue aprobado y fijado por el Congreso de la Ciudad de México este 2025 para reconocer, visibilizar y enfrentar la violencia sistemática que viven las personas trans en la Ciudad de México. Así como para reconocer las aportaciones sociales, culturales y políticas de las personas trans; promover acciones institucionales para combatir la discriminación, los discursos de odio y la exclusión histórica, y para impulsar políticas públicas con enfoque de derechos humanos y no discriminación. El Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED) se unió a la conmemoración del “Día Local de la Memoria Trans”, fecha en la que se recuerda a las personas de identidades trans y de género no normativo cuyas vidas han sido vulneradas o arrebatadas por motivos de odio, rechazo o prejuicio. Este día nos invita no solo a honrar su memoria, sino también a reafirmar el compromiso institucional de construir una ciudad segura, digna y libre de discriminación para todas las identidades y expresiones de género. En la Ciudad de México, avanzar hacia la garantía plena de derechos para las personas trans exige reconocer las múltiples violencias estructurales que enfrentan en el acceso a la salud, la educación, el empleo, la vivienda, la seguridad y la vida comunitaria. Estos obstáculos persisten a pesar de los avances normativos y sociales que la capital ha impulsado en materia de igualdad. Por ello, resulta indispensable fortalecer las políticas públicas, los marcos de actuación institucional y las acciones coordinadas que permitan eliminar la transfobia en todas sus formas. El COPRED subraya que ninguna expresión de género debe ser motivo de exclusión, estigmatización o violencia. El reconocimiento y la protección de los derechos de las personas trans es una responsabilidad colectiva que involucra a las instituciones, los sectores público y privado, las comunidades y la sociedad en su conjunto. hojaderutadigital.mx


